El día 20 de Noviembre se ha instituído como Día Universal de los Niños , fecha que coincide con la Declaración sobre los Derechos del Niño (20/11/59) y la Convención sobre los Derechos del Niño (20/11/89) presentadas y aceptadas por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
ALTO A LA VIOLENCIA CONTRA LOS NIÑOS Y NIÑAS TRABAJADORES.
Cada año, millones de niños y niñas tienen que pagar un alto precio en sufrimiento y abusos por el trabajo que realizan. Según el informe publicado por la Organización Internacional del Trabajo OIT, sobre la violencia contra los niños y niñas publicado con motivo del Día Universal de los Niños, gran parte de los más de 300 millones de niños, niñas y adolescentes trabajadores sufren malos tratos, violencia física y psicológica, abusos verbales o sexuales. En el informe se describe un cuadro desgarrador de la naturaleza, magnitud y causas de la violencia contra los niños y niñas, incluídas ciertas formas de violencia en los lugares de trabajo.
Las formas más comunes de violencia contra los niños y niñas trabajadores son de orden físico, psicológico o sexual. La violencia que sufren los niños y niñas trabajadores es a menudo sistemática y forma parte de la cultura colectiva del lugar de trabajo en que la brutalidad física, los gritos, las palabrotas y la violencia ocasional como el acoso sexual, y en casos extremos, la violación o el asesinato son moneda corriente. Aunque apenas se dispone de datos fidedignos sobre el número exacto de niños y niñas trabajadores que son víctimas de la violencia, en particular respecto a los niños y niñas en la economía informal, que es en donde trabaja la inmensa mayoría, todo apunta a que la presencia de niños y niñas en el lugar de trabajo, tiene un lado oscuro y vergonzoso.
Son muchos los factores que llevan a los niños y niñas a trabajar en ocupaciones peligrosas para poder afrontar su propia existencia diaria y las de sus familias. "Es difícil establecer categóricamente en qué momento el trabajo puede resultar beneficioso para futuras etapas de la vida laboral, y cuándo empieza la explotación y el abuso. En muchas sociedades, los padres conceden mayor importancia al trabajo de los niños y niñas en actividades económicas que a su asistencia a la escuela, en particular cuando la calidad y pertinencia de la educación es baja. Los niños y niñas que se encuentran en estas sociedades y situaciones, trabajan inducidos por sus familias o empleadores y tienden a hacer lo que se les dice". explica Frans Roselaers, Director del Departamento de Asociaciones y Cooperación para el desarrollo y miembro del consejo editorial del informe citado.
En muchas sociedades es una práctica consistente hacer venir a niños y niñas de otras familias para que realicen trabajos domésticos, hecho considerado desde hace mucho tiempo como una forma de hacerse cargo, adoptar o asistir a niños y niñas procedentes de familias menos pudientes. Hoy en día, tales prácticas se ha comercializado. Aunque existe una pequeña proporción de varones, el trabajo doméstico suele reservarse a las niñas y mujeres, constituyendo la categoría más importante de las niñas menores de 16 años en todo el mundo. Según el informe, se está convirtiendo cada vez más en una forma de empleo no reglamentado, de explotación; e incluso de servidumbre. "Los padres suelen considerar que la situación de las niñas que trabajan en el servicio doméstico es segura porque tienen un mejor alojamiento que en casa, se puede esperar que coman mejor, y están bajo el cuidado de la mujer de la casa. . . . Sin embargo, las jóvenes corren un gran riesgo al trabajar en casa privadas pues están a la merced del empleador y otros miembros de la familia" explica Roselaers.
El ejemplo mas flagrante de violencia contra los niños y niñas, es la explotación de menores de 18 años en trabajos relacionados con el sexo, la pornografía de niños, niñas y adolescentes y las tiendas del sexo. Aunque las cifras que se barajan en torno a los niños y niñas que entran en la prostitución no son más que estimaciones aproximadas, se calcula que cada año cerca de un millón de niños y niñas cae en la explotación de la industria del sexo.
Los niños y niñas que trabajan en entornos de trabajo inseguros también corren riesgos. En 2004, se estimó que el más del 60% de los 128 millones de niños y niñas trabajadores en el mundo, trabajaba en ocupaciones "peligrosas". Entre ellas, figuran el trabajo en las fábricas de vidrio, la minería, y la agricultura de plantación en donde las disposiciones de seguridad y salud suelen ser poco estrictas o inexistentes, señala el informe. "La violencia de que son objeto los niños y niñas trabajadores premanece "oculta" porque casi nunca se plantea directamente la cuestión: se recoge sistemáticamente información sobre la violencia contra las mujeres y otros trabajadores, pero se suele pasar por alto a los niños y niñas trabajadores" manifiesta Roselaers.
Los países deberían adoptar medidas específicas para ponerse en contacto con niños y niñas que pudieran ser víctimas de la violencia, rescatarlos y rehabilitarlos con la ayuda de las organizaciones de empleadores, los sindicatos y organismos gubernamentales, inculídos los servicios de inspección.
Más de 300 millones de niños, niñas y adolescentes sufren malos tratos y violencia física en el mundo, abusos de toda especie que ponen en evidencia las marcas más brutales de la opresión y la exclusión de una infancia humillada pos la sistemática violación de sus Derechos Humanos.
Fuente consultada: ONU - Informe sobre la violencia contra los niños - Informe de la Organización Internacional del Trabajo OIT - Publicado en el Foro Latinoamericano de Políticas Educativas - FLAPE Info.novedades Nª 13 -
